"La verdad es que la mayoría de las mujeres son débiles, ya sean mortales o inmortales. Pero cuando son fuertes, son absolutamente imprevisibles". (Anne Rice)
Saturday, February 20, 2010
Especies diferentes
Por fin. Sumando, debo haber dormido unas 25 horas en total en la última semana, pero no estoy aquí para hacer un numerito de autolástima, sino para compartir el enormísimo placer estético-narrativo que experimenté viendo la peli Let the Right One In (Låt den rätte komma in en sueco y traducida al español como “Déjame entrar”), de Tomas Alfredson.
La historia va de vampiros adolescentes. Sin embargo, no se trata para nada de una movie Kitsch y pseudosentimental, con la facilona moral de los vampiros que se resisten a su especie maligna, mas continúan chupando sangre aunque les duela el alma (porque, a diferencia de los zombies, los vamps tienen alma y un largo y tortuoso pasado).
La jovencísima y pálida Lina Leandersson (13) interpreta a Eli, la vampira melancólica y algo freak que terminará enamorándose de su vecino en un sórdido barrio de Estocolmo, Oskar (12), el outsider que no se atreve a enfrentar a los nazis del curso. La relación entre Eli y Oskar, entonces, está fundada en esa excentricidad compartida, ambos están al margen de sus mundos y han sido heridos. De nuevo, como en todos los relatos clásicos de encuentro y desencuentro entre especies (pienso de nuevo en la novela Hiere zarza negra), en “Déjame entrar” los protagonistas cruzan la frontera invisible –cuya sustancia, el inconmensurable tiempo, no será obstáculo suficiente- para entrar en la maravillosa indeterminación del amor imposible.
¿Qué la hace tan buena peli? Quizás, que no es gringa. Es sueca, suequísima. Y es que Hollywood ha maltratado tanto al subgénero vamp que pensar en el minimalismo y la sangre suficiente, o en un menos obvio manejo de la violencia catalizadora, como posibilidad estética para el Vamp Movie parecía cosa de raros, una locura. Y lo es. “Déjame entrar” no sólo mantiene en el estado de potencia el deseo sexual, sino que insinúa la androginia como el estado ideal para ese deseo. Al parecer (según lo que he investigado de la novela sobre la que se basa el guión), Eli habría sido un niño que hace doscientos años, antes de ser convertido a su nueva existencia, fue castrado.
Sí, hay dolor y poesía en este relato cinematográfico, y mucho más que decir, pero es preferible verla. Y ver incluso las escenas censuradas, no estoy segura si sólo para la edición gringa o si se trata de una decisión narrativa; en todo caso, lo que no entró habla también de cómo se construyó el aura sensual, las vidas íntimas del filme: callando, antes que desnudando.
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Acabo de descubrirte y me intriga leer tu nueva novela, como la consigo?
ReplyDeleteAcabo de ver Paranoid Park y Let the right one in, la vi hace tiempo. 2 películas que no estan en la videoteca de muchos no crees?
Hola, Tonny,
ReplyDeleteBienvenido al darky. Dónde vivís? Quizás pueda hacerte llegar un ejemplar a tu apartado postal.
Un beso.
Entre la nieve y la inercia. Cuando llegas en avion parace esa escena de Star Wars cuando Han Solo sobrevuela el planeta de los wookies y se ve todo verde...
ReplyDeleteSi tenes tiempo y te dan ganas escribime:
tonnyvelasco@mac.com
Y te doy los datos, estoy en Connecticut.
"What an awe it is, that flickering of a light, that exempts us from the here and now. To engage us, in the affair of the movies. What is it about the big screen? It immerses us into realms unknown and familiar. To experience a film is to distract the wounded heart, to engage dormant senses and to connect to the intangible. Moving pictures are reminders of our humanity; they wrap you around the moment and suspend disbelief. They deceit you, make you cry, lift your emotions to a roar and show you beauty uncompromised and poignant. Unlike the written word, or a song, motion pictures stare back at you and linger in memory, they construct a world somewhere else to rob you of credulity and return it with dividends. What an awe it is to shed a tear, to laugh out loud, to believe and to stay still while the credits roll, hoping that what you feel right there and then, stays with you for a little bit longer”
ReplyDeleteExacto, ahora somos Homo Screeners.
ReplyDeleteCinéfilos gemelos...
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